En la Real
Gran Peña de Madrid, se celebró el pasado día 17 de junio, organizado por el
Cuerpo de la Nobleza del Principado de Asturias, un almuerzo en homenaje al
Jefe de Protocolo de la Embajada de la Federación de Rusia, Ilmo. Sr. Igor
Ermolenko, con motivo de la finalización de su mandato en el Reino de España.
El almuerzo
estuvo presidido por el Consejero Magistral de la Corporación, Excmo. Sr. D.
Francisco de Borbón, Duque de Sevilla.
El Consejero
de Relaciones Institucionales, D. Alfredo Leonard, en nombre del Cuerpo de la
Nobleza de Asturias, leyó unas sentidas palabras en homenaje a don Igor
Ermolenko, en las que destacó las numerosas actividades que la Embajada de
Rusia y la Corporación asturiana han organizado de forma conjunta en los
últimos años, recordando al Sr. Ermolenko que a partir de ahora tiene su casa y
amigos en Asturias y en su Cuerpo de la Nobleza.
Seguidamente
el Vicecanciller de la Corporación, don Manuel Rodríguez de Maribona entregó al
Sr. Ermolenko una placa de plata en agradecimiento por toda su labor en estos
últimos años.
Posteriormente
el Sr. Ermolenko, quien acudió acompañado por su esposa, la Sra. Dariya
Goryacheva de Ermolenko pronunció unas entrañables palabras de agradecimiento,
comentando sus años en la Embajada de Rusia en Madrid, y en especial las
actividades que ésta ha desarrollado junto con la noble corporación asturiana.
Asistieron
entre otras personalidades, el Embajador de la Federación de Rusia, el
Embajador de la República de Malta, el Marqués de Monasterio, D. Manuel
Rodríguez de Maribona, los Duques de Maqueda, los Condes de Cabra, don Carlos
Franco y Suanzes, D. Mikhail Khodyankin, Primer Secretario de la Embajada
Rusía, D. Farkas Vajkdon, de la Embajada de Hungría, D. Felipe de Grado y
Gascón, don Manuel Ruiz de Bucesta, el Cónsul Andrey Dryakin don Juan Luna,
doña María José Fourrat, doña Masoumeh Abdi, doña Nasrin Zhiyan, Dña. María
Queipo de Llano, don Manuel Álvarez de Ron, don Gerardo Gómez de Valcárcel,
doña Marta Gómez de Valcárcel y López Cerezano, don Francisco Obregón y don
Justo Otero del Castillo.
A continuación
se sirvió un almuerzo a todos los asistentes.
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